Orgullo y Prejuicio (1995)

Esta serie ha sido uno de mis regalos de cumpleaños, como mostré en la entrada anterior. Es una serie que desde Lost in Austen quería ver y alguien de mi familia se percató, de modo que decidieron regalarme la edición en DVD. Al principio pensé que era excesivo regalármela sin saber si me gustaría o no, pero basándose en mi gusto por las películas de época, fue un regalo acertado. Además, la heroía de Jane Austen que me tocó a mi fue Elisabeth Bennet, y el banner de ese test muestra precisamente a Jennifer Ehle, con lo que todo apuntaba a que me gustaría.

Y así fue. Adoré esta serie. Cuando salió la película protagonizada por Keira Knightley y Matthew Macfadyen los miembros femeninos de mi familia decidieron que estaría bien verla una tarde sin más y la pusieron en el salón nada más se estrenó en DVD y pudieron alquilarla. Corría el año 2005 o 2006 y yo por aquel entonces tenía unos diez u once años. Comprensiblemente la película no sólo me pareció aburrida, sino que consideré que era carente de sentido y que yo sería de las personas que se negarían en rotundo a leer algo de Jane Austen. Me equivoqué. Hace dos años leí Persuasión y decidí darle otra oportunidad a la escritora inglesa, pero aún no he encontrado la ocasión adecuada para seguir leyendo sus obras.

En mi viaje a Madrid me compré el libro de Northanger Abbey y llegará próximamente, de parte de BookDepository, el libro de Pride and Prejudice. El tema es que, gracias a Lost in Austen le di otra oportunidad a la historia de Elisabeth Bennet y el señor Darcy. No me arrepiento en absoluto. La serie sólo ha hecho que tenga aún más deseos de leer el libro e indudablemente se ha convertido en una de mis series predilectas, a pesar de ser algo muy alejado de lo que me suele gustar - véase Roma de la HBO o Walking Dead. Este es mi lado más emocional y no me arrepiento de mostrarlo.

En lo que respecta a la mini serie no sé por dónde empezar. La ambientación está increíblemente bien hecha y los personajes fueron perfectamente escogidos - al menos a mi parecer. Debo admitir que a Jane la imaginaba de otro modo - puede que la película anteriormente mencionada hiciese que la imaginara de otro modo, así como la serie de Lost in Austen - pero la actriz que la interpreta lo hace estupendamente teniendo en cuenta la personalidad de la hermana mayor de Lizzi. El resto de personajes - no protagonistas - también están perfectamente interpretados. El papel de Wickham demuestra un especial gusto al elegir a Adrian Lukis, quien considero tiene el porte perfecto y la sonrisa ideal para el papel del hombre atractivo y bondadoso en apariencia pero relativamente manipulador en realidad.

Sobre los protagonistas... nunca habia visto una Elisabeth Bennet tan bien representada, ni con un rostro tan amable y agradable. La mirada de Jennifer Ehle y sus expresiones son perfectas para la enérgica y perspicaz - aunque prejuiciosa - Elisabeth Bennet. Y el señor Darcy es sencillamente perfecto. Colin Firth hizo un trabajo excelente con un personaje tan particular y comedido, aunque bondadoso y capaz de amar y ser profundamente amado. Tiene algo que le convierte en el mejor Darcy que he visto - y he visto tres. No desmerezco la labor de Elliot Cowan ni mucho menos - que también hizo un excelente trabajo en Lost in Austen -, pero creo que tampoco son papeles comparables dada la diferente naturaleza de sus series. 

La autora o autor de este .gif merece todo mi respeto.

Tras ver esta producción de la BBC comprendo perfectamente a Amanda, la protagonista de Lost in Austen, cuando se sentía completamente enamorada con el personaje del Señor Darcy, más aún con el que intepretaba Colin Firth. En un principio pensé que sería una exageración conveniente para la ficción de la serie, pero para nada. Entiendo absolutamente porqué se sentía así de enamorada. Yo  me encuentro en esa misma situación de parcial enamoramiento con un personaje de ficción y, más aún, con el Colin Firth que interpreta a Darcy. Excelente, simplemente excelente.

La banda sonora y los paisajes fueron, del mismo modo, ricamente seleccionados y cuidados, para lograr la sensación de viajar a un siglo totalmente distinto al nuestro. No puedo decir que quisiese vivir en esa época - la libertad que me ofrece el siglo XXI como miembro del género femenino no se puede comparar con la del XIX -, pero sí que me encanta poder verla en la distancia y maravillarme con el refinamiento, la caballerosidad y las buenas maneras del momento. Aunque, todo sea dicho, me gusta también en demasía la brutalidad - dependiendo el ámbito - y la sinceridad implacable de nuestros tiempos. 

No queda mucho más que decir, fuera de que la señora Bennet me recuerda a alguien muy cercano a mi persona y que, en incontables ocasiones, me sacaron de quicio su personalidad y sus modales, llegando a provocarme vergüenza ajena. Pero bueno, eso es otra historia. 

La serie es impecable, el reparto es maravilloso y la recreación de época es perfecta. Me alegra ver que la BBC siempre ha sido juiciosa a la hora de recrear grandes clásicos de la literatura inglesa como puede ser este que me ocupa, Orgullo y Prejuicio. También me alegra que un sabio miembro de mi familia propusiese y adquierese para mi este regalo tan preciado que ahora guardaré como oro en paño. Me despido recomendándola encarecidamente a todos aquellos amantes de las grandes épocas del pasado y del romance complejo pero sincero.